El Camí de Quart en Valencia

Las Torres de Quart
La calle de Quart extramuros, con la iglesia de San Sebastián, vista desde las Torres de Quart

El camí de Quart enlazaba la ciudad de Valencia, atravesando la muralla medieval por el portal de las Torres de Quart, con la cercana población de Quart de Poblet. Su recorrido ha quedado integrado en la traza urbana, recorriendo las calles de Quart, San José de la Montaña, Castán Tobeñas (ahora calle de la Democracia), pasa por la Cruz de Mislata, y las calles Valencia y Mayor, por la partida de l’Alitrá, junto al Hospital Militar, para encarar ya en Quart la avenida del Antic Regne, y desembocar en la Plaza Valldecabres, donde casi con seguridad se hallaba la piedra que indicaba la cuarta milla de ese camino. Este primer tramo, entre el portal de Quart y el límite municipal, tiene una extensión de unos 2 km y en su recorrido encontramos múltiples puntos de interés:

Plano del camino

Casa Miguel Costa

En el nº 63 de la calle Quart (extramuros) encontramos la casa Miguel Costa, edificio historicista romántico con torre miramar, de 1896, con diseño de Vicente Bochons, autor también del chalet de Blasco Ibáñez. Se encuentra justo frente a la ferretería Dols, cuyo propietario fue mi compañero de clase durante el bachillerato en la ya desaparecida Academia Castellano, en la cercana calle Guillem de Castro.

Edificios rehabilitados de principios de siglo en la calle Quart

En el número 79 encontramos un altar con un retablo del S.XV, con una placa explicativa y la fecha 1963 en su base.


Altar en el número 79 de la calle.


Iglesia de San Sebastián

Un poco más adelante, antes de llegar a la Gran Vía de Fernando el Católico, se encuentra la Iglesia de San Sebastián, único resto del antiguo Convento de San Sebastián, demolido poco después de 1835 en aplicación de la ley de Desamortización de Mendizábal. La iglesia actual es de 1739.

Umbráculo del Jardín Botánico

Frente al convento de Mínimos de San Sebastián la ciudad ofrece en 1802 a la Universidad un huerto que permitía ser regado a la manera tradicional, «a manta», directamente por la acequia de Rovella, llamado Huerto de Tramoyeres, que dio origen al actual Jardín Botánico.

En el cruce de nuestro camino con la Gran Vía podemos ver el monumento al humorista Luis Sánchez Polak, Tip. Y en el siguiente tramo de calle, en el número 113 de la calle Quart, nos encontramos con el edificio proyectado en 1935 por Luis Albert Ballesteros para el industrial Máximo Buch, cuya fábrica de cepillos se encuentra a espaldas de éste.

Iglesia de San José de la Montaña

Ya en la actual calle San José de la Montaña, encontramos el conjunto formado por la Iglesia, convento y colegio de San José de la Montaña, de la Congregación Madres de Desamparados, que ocupa una manzana completa. La iglesia, construida en "revival" neogótico en 1925, es obra del arquitecto Francisco de Mora y Berenguer. Frente a la iglesia, entre nuestro camino y el cauce del río, podemos ver el antiguo matadero municipal, hoy reconvertido en polideportivo.

Antigua Cárcel de Mujeres

Continuando nuestro camino, ya en la actual calle de la Democracia (hasta hace poco calle de Castán Tobeñas, por obra de la Ley de Memoria Histórica), pasamos junto a la antigua Cárcel de Mujeres. Fue construida en 1925 por el arquitecto Vicente Agustí, especializado en arquitectura penitenciaria, siendo autor de la cárcel de Carabanchel en Madrid, entre otras. El edificio cumplió su función de prisión hasta que a principios de los 90 fueron trasladadas tanto las mujeres como los hombres de la cercana Cárcel Modelo a las nuevas instalaciones de Picassent. En 1939, finalizada la guerra civil, fue nombrada directora de la prisión Natividad Brunete Gómez, tía abuela de mi esposa. El edificio fue reformado, respetando su estructura principal, para alojar en su interior el colegio público “9 d’Octubre”, de modo que en el patio donde antaño tomaban el aire las reclusas, en la actualidad hacen deporte los estudiantes.

Más o menos frente a su puerta principal, junto al pretil del río, podemos ver un banco de piedra; se trata del banco de los magistrados de la Junta de Murs i Valls. Según la tradición, desde él podían registrar el paso de la madera que los gancheros hacían descender desde el Alto Turia.

Antigua alquería y fábrica de muebles

En la acera opuesta, haciendo esquina con la calle Torres, aún persiste una vieja alquería en la que posteriormente se instaló la fábrica de muebles Cuesta, cuyos últimos propietarios también son parientes de mi esposa.

Alquería de Julià


Unos cientos de metros más adelante, en la misma calle, se encuentra la alquería de Julià. Se trata de un conjunto agropecuario del siglo XVII edificado en estilos manierista y barroco. El conjunto constaba de un edificio y un jardín inmediato a la vivienda. El edificio se puede considerar como uno de los escasos ejemplares que se conservan de alquería valenciana del siglo XVII. El jardín tenía un laberinto y una glorieta alrededor de la cual se disponían setos cuadrangulares. Tras el mismo, una terraza, y a continuación un huerto con un camino central bordeado de emparrados y, en la zona más alejada de la vivienda, un pinar resto de la Gran Pinada Moyá de Campanar. En la actualidad sólo se conserva la alquería, habiéndose perdido el huerto y parte del jardín. Pertenecientes a una importante familia de mercaderes valencianos que alcanzaron una gran fortuna entre los siglos XVI y XVII financiando al gobierno de la ciudad, los Julià fueron miembros de una oligarquía municipal que dejó en este conjunto arquitectónico su huella indeleble para siempre. Por ello, la Alqueria Julià fue a través de los siglos protagonista de grandes hechos históricos: Ha escuchado la voz de San Vicente Ferrer predicando en el huerto de la Alquería; ha sido estrado de los pies del Mariscal Suchet, quien contempló desde su torreón la toma de Valencia por las tropas francesas y la heroica resistencia que ofreció la ciudad; y ha guardado entre sus paredes el sueño de la futura Reina Isabel II, que pernoctó en la Alquería mientras María Cristina renunciaba a su condición de regenta. También ha sido utilizado como Colegio Público. La Alqueria Julià fue declarada Monumento Artístico Nacional en 1978 y Bien de interés Cultural, BIC, en 2007.

Aproximadamente a esta altura, si nos desviamos hasta el cercano cauce del Turia, podremos ver el azud desde donde la acequia de Rovella tomaba agua del río.

Antigua Cárcel Modelo

Poco antes de que el Camí de Quart abandone el término municipal de Valencia para adentrarse en Mislata, encontramos la antigua Cárcel Modelo, que comenzó a edificarse en 1889 y se finalizó en 1901, con el diseño y dirección del arquitecto Joaquín María Belda.​ Se dejó de emplear como centro penitenciario en 1991. En el año 2008 el edificio se rehabilitó y desde el 2010 es un centro administrativo de la Generalidad Valenciana en honor al 9 de octubre.​ La rehabilitación estuvo a cargo del arquitecto valenciano Juan Añón. En ella se rodó la película española Todos a la cárcel dirigida por Luis García Berlanga en el 1993.

Nuestro paseo tiene continuidad en el siguiente artículo, El Camí de Quart, segunda parte: Mislata.

Fuentes:
Fotografías originales del autor.

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