La Cruz Cubierta
Actualmente, en Valencia existen 14 cruces de término, entre las que se encuentran la del Camino Morvedre, que es la más antigua, la Cruz del Canyamelar o la Cruz de Pinedo o Creu de Conca. Sin embargo, una de las más conocidas es la que se encuentra en el antiguo Camino Real de Xàtiva.
La cruz que da nombre al barrio es una obra gótica de 1376 que ha sido un referente para la ciudad, ya que marcaba el final de la calle más larga de la ciudad (Calle San Vicente Mártir) . Construida en el antiguo camino real a Játiva y Alicante, y fue restaurada en varias ocasiones. Primero entre 1432 y 1435 por Juan del Poyo y Johan Llobet por cuenta de la Fábrica de Murs e Valls, más tarde también en el siglo XVI y por último en 1898 por José Aixá.
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| La Creu Coberta |
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| Bóveda gótica |
Recibe el sobrenombre de Creu del miracle y es una de las cruces que marcaban por aquel entonces los límites geográficos de la ciudad en la Edad Media. El significado de estas cruces en el Reino de Aragón era el de “fomentar la piedad de los viajeros” ya que solían colocarse frente a monasterios, ermitas u otros templos cristianos. Estas cruces servían para reafirmar la fe cristiana de unos ciudadanos que todavía se encontraban rodeados en un contexto de gran población musulmana.
Para algunos historiadores que la Cruz Cubierta sea conocida como la “Creu del miracle” hace supone que en este emplazamiento ocurrió un milagro en la época aunque esto no se ha podido probar. Para otros era uno de los tantos recuerdos que dejó Jaume I El Conqueridor tras la Reconquista mandando a levantar estas cruces en aquellos lugares de la ciudad donde sus tropas habían acampando para sitiar la ciudad.
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| Escudo de la ciudad |
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| Reverso de la Cruz |
La cruz se proteje por un templete con bóveda gótica de crucería octopartita, la plementaria se decora en color blanco y dorado en la línea de los nervios. La obra primitiva fue policromada por Nicolás Querol. Templete con chapitel y tejas de cerámica rojas y azules brillantes; las cuatro caras o paños del templete ofrecen vanos de ojivas casi equiláteras, peraltadas y con molduras sencillas. En la clave de la bóveda está el escudo de la ciudad. El templete se apoya en cuatro pilares con contrafuertes angulares. El pilar octogonal de la cruz apoya en una pequeña basa circular. La cruz propiamente dicha es de piedra tallada con adornos figurativos y ornamentales de la transición gótica-renacentista, representando en el anverso a Cristo crucificado entre la Virgen y San Juan. En el reverso la figura de Dios Padre con dos orantes a sus pies. En el capitel bajo doseletes góticos diversos santos y escudos de la ciudad coronados (San Miguel y San Jorge entre otros). Por el interior y apoyados en los pilares sendas pequeñas columnillas en cuyo capitel encontramos escudos de la ciudad de Valencia, con corona y laurel.
Fuentes:
Fotografías originales del autor
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