El Palacete Echeveste y el Valencia Cinema
Ocupa los números 21 y 23 de la calle Quart. Los terrenos y parte de los muros del edificio son los antiguos muros góticos del convento de la Puridad (que aún conservan los arcos ojivales), convento que fue uno de los más grandes de la ciudad y que abarcaba el espacio que hoy ocupan dos manzanas. Tras la desamortización de Mendizábal en 1835, gran parte de las propiedades de la Iglesia pasaron a manos de la burguesía, entre otros el Convento de la Puridad. En 1860 y tras adquirir los terrenos Doña Peregrina de Echeveste, solicitó licencia para la construcción de este singular edificio. Para tarea tan ambiciosa encargó el proyecto al quizá más importante arquitecto de la época en Valencia, Joaquín María Calvo Tomás.
El edificio de gran volumen, está proyectado en dos zaguanes idénticos. En su composición toma principal protagonismo el primer cuerpo compuesto por planta baja y entresuelo distinguido por un llagueado pintado en color azul (color idéntico del original) y con dos puertas de acceso a los zaguanes de gran altura que ocupan las dos primeras plantas. El edificio continua en tres alturas decrecientes tanto en altura, como en profusión decorativa.
La entrada principal nº 21, antigua entrada de carruajes, daba a un jardín posterior de 400 m que según escrituras antiguas constaba de caballerizas fuente, pozo y jardín. Actualmente este espacio está ocupado por la nave que era el antiguo Cinema Valencia. La entrada de gran tamaño y altura da a una escalera imperial en mármol de Carrara que culmina en una cúpula de grandes dimensiones decorada por unos frescos del pintor italiano P. Perini que fueron fechados en 1861. Desde el último tramo de escaleras y mediante una puerta camuflada en las pinturas se accede a la torre Miramar desde donde se puede divisar toda la ciudad incluida el mar.
En la planta Principal se encuentra la vivienda palaciega que antiguamente ocupaba toda la planta principal con una superficie de 540 m. En 1996 fue adquirido por la actual propiedad que realizó una restauración integral del edificio, conservando, recuperando y restaurando todos los elementos antiguos, así como su estructura e instalaciones adaptadas a las exigencias y normativas actuales. La restauración fue realizada por Nieves y Carmen Ortiz.
En la fachada del número 21 de este edificio hay una placa conmemorativa que nos recuerda que aquí nació y murió el poeta Rafael Ferrer y Bigné (1836-1892). Fue un abogado, erudito y poeta de la generación moderada de la Renaixença. Como periodista especializado en informaciones cultural y jurídica escribió en numerosas publicaciones valencianas y de difusión nacional. En 1866 formó parte de la redacción fundacional del periódico Las Provincias, con cuyo director y propietario, Teodor Llorente, siempre mantuvo una estrecha colaboración y amistad. Dirigió la revista anual Almanaque de Valencia, en 1864 y 1865. Impulsó en 1878 la creación de la sociedad valencianista Lo Rat Penat, de la que fue presidente entre 1881 y 1882.
Otra placa en la fachada, en el número 23, nos recuerda que en este lugar vivió y murió (en 1914) el poeta y autor dramático Manuel Millás Casanoves. Escribió más de treinta textos teatrales, en valenciano y castellano, y varios libros de poesías y epigramas, alcanzando notable popularidad. Las publicaciones que recogieron sus escritos literarios fueron Diario Mercantil de Valencia, Las Provincias, Valencia Cómica, y otras. Colaboró con el movimiento cultural de la Renaixença, promoviendo primero la creación del Ateneo Científico Literario, donde ocupó la vicepresidencia de la sección de Literatura, y posteriormente la entidad Lo Rat Penat, de cuya junta directiva formó parte en 1891 y 1892. También participó en los Jocs Florals de 1880 y 1882.
Las Provincias, 16 de noviembre de 1933 |
El Valencia Cinema, referente del teatro independiente y antifranquista en los años 70, se construyó en 1933 bajo la dirección del arquitecto Joaquín Rieta Síster, autor también de los cines Capitol y Tyris. Tenía una capacidad de 730 localidades, 580 de platea y 150 en la general. Con la irrupción del cine sonoro pronto se convertiría en un funcional cine de sesión continua con películas de reestreno. Con la llegada de la guerra el local derivó de nuevo el teatro, para cambiar después al cine. En el mismo entorno que el Teatro Princesa, en su etapa dorada convirtió el centro histórico en epicentro del espectáculo. En la última semana del año 1950 proyectaba "La sinfonía del amor" y "Juana de Arco". Su alternancia sería constante a lo largo de su dilatada y azarosa vida, incluso abarcando parcelas que iban más allá del puro espectáculo, como fue el apoyo prestado a la plataforma "Studio", movimiento cultural y progresista que tendría su local en calle Taquígrafo Martí, 4, donde ofrecía cine-club, conferencias, conciertos, etc. y que desde 1975 se trasladaría a la sede del Teatro Valencia Cinema. En este tiempo cambiante comenzaría otro periplo muy diverso, en algunos casos al amparo de subvenciones. Dos años ofreciendo conciertos de música con los cantautores más afamados del momento, luego Cine-Club programando películas del Este, después sala de la Filmoteca de la Generalitat, de 1979 a 1984, y finalmente teatro independiente o "de estudio" hasta quedarse a las puertas del nuevo milenio, ya que después de ser restaurado el local y el edificio y de albergar grandes perspectivas, desapareció con la excusa de una reforma urbana que no se hizo.
Fuentes:
Fotografías originales del autor
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