El edificio Gómez II, Valencia



El edificio Gómez II es un edificio de viviendas situado en calle de la Paz número 21. Se trata de un edificio residencial plurifamiliar de estilo modernista valenciano construido en el año 1905, obra de los arquitectos Francisco Mora Berenguer, Antonio Martorell Trilles y Enric Sagnier.

En 1902 Francisco Mora recibe el encargo de terminar las obras que Manuel Gómez había comenzado a construir bajo la dirección del arquitecto Martorell. Construido en uno de los cruces más importantes de la calle de la Paz, sobre un solar sumamente irregular, presentando dos fachadas que definen la esquina y una tercera a la calle posterior. Consta de planta baja, entresuelo y cuatro plantas piso. 

La manzana sobre la que se construye es muy irregular y compacta, ventilada mediante patios de luces. Cuando Mora asume la dirección de las obras, ya están levantados los cimientos de la primera casa y la planta baja. La familia Gómez, perteneciente a la burguesía valenciana, conocía el éxito que por esos años estaba teniendo, entre la burguesía barcelonesa, la incorporación de los nuevos lenguajes modernistas como símbolo del progreso de una clase dominante. Mora conoció a Enrique Sagnier durante sus estudios en Barcelona, quien, a su vez, era amigo de la familia Gómez. Los planos modificados fueron realizados por Enrique Sagnier, hecho que Mora reconoce al manifestar que sólo dirigió la obra, aunque el proyecto quedó perfectamente asumido, quedando de manifiesto la voluntad de Mora por utilizar un lenguaje que rompía radicalmente con el proyecto elaborado por Martorell.

El nuevo proyecto posee la misma composición que el anterior, con el mismo número de huecos e igualmente distribuidos. Se refuerza la idea de la esquina enfatizándola con un cuerpo cilíndrico que se remata por un templete cubierto por una cúpula de escamas. En la primera planta de este cuerpo destaca el mirador poligonal de grandes vanos coronado con balcón de antepecho calado de piedra. El aspecto del edificio varía radicalmente; se acoplan elementos decorativos del repertorio modernista en su vertiente art-noveau y de piezas experimentadas por Sagnier en el Ensanche Barcelonés como los miradores poligonales de grandes huecos acristalados. Se alternan los muros lisos chapados con cerámica biselada de color verde, con los revocos de mortero en los que se acusa el despiece de sillería.

Fuentes:
Fotografías originales del autor

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