El barrio obrero "Ramón de Castro", Valencia

De este barrio, situado en la calle de Ramón de Castro, entre la avda Tres Forques y c/ Cuenca, se conservan 18 de las 34 casas que se construyeron en el año 1906, con materiales consistentes de piedra y ladrillo y con azulejos en su interior, y a cuyos propietarios les entregó las llaves de las viviendas la reina Victoria Eugenia en su visita a la exposición regional de 1910. La de sus muros es una historia de supervivencia en medio de un entorno despoblado, lejano y al que no iba nadie nunca. Estas viviendas forman parte de una serie de barriadas de viviendas unifamiliares, que fueron construidas por la Sociedad Constructora de Casas para Obreros de Valencia. Esta asociación estaba apoyada por la 'Junta Directiva o de Patronos', que presidía Ramón de Castro Artacho. Una importante y pionera labor, teniendo en cuenta que las fechas de construcciones de estas económicas barriadas son anteriores a la promulgación de la Ley de Casas Baratas, publicada en la Gaceta de Madrid en 1911, planteada para dignificar las condiciones de vida de la creciente y migrante clase trabajadora, que se multiplicaba en España con el tardío proceso de revolución industrial. Bajo la dirección de J. M. Cortina, se edifican en el camino viejo de Valencia en Patraix, junto a las vías del tren Valencia-utiel. La barriada recibirá el nombre de Ramón de Castro, en honor al mecenas que la hizo posible.

Cada vivienda está formalizada en una planta, con dos dormitorios, dos salas, un comedor, una cocina, excusado, pozo y corral. La fachada es de 9.10 m y una altura de 4 m, un total en planta de unos 120 m2 aproximadamente. Es el único referente que queda en la ciudad de este tipo de barrios obreros,construcciones derivadas de los procesos industriales y mercantiles de una época.

Las rejas de cada ventana son diferentes. Una es una 'B' y la otra forma una 'O', las iniciales de "Barrio Obrero". Actualmente los números a mano derecha de la calle tienen un nivel 2 de protección municipal, construcciones derivadas de los procesos industriales y mercantiles de una época.

La escoleta infantil "El Trenet" fue hace más de un siglo dos casas distintas, que se juntaron a finales de la década de los setenta para adaptar el proyecto escolar. La reforma para juntar las dos construcciones corrió a cargo del Ayuntamiento. Otras tres de estas casas fueron antaño una fábrica de jabones, y en una de ella tenía su taller el escultor valenciano Manolo Boix.

La degradación de las casas es más que evidente, incluso varios de los inmuebles estuvieron ocupados ilegalmente, hasta que en 2017 hubo un incendio y tuvieron que ser desalojados. Ahora siguen abandonadas. Fueron declaradas Bien de Relevancia Local en 2015.