El molí de la Gàbia y la alquería de Nicolau


El conjunto del Molí de la Gàbia o de la Closa, en el Camino Viejo de Picassent, frente al Tanatorio municipal, es uno de los viejos molinos que aún quedan en pie de lo que fue una de las mayores huertas valencianas, la que regaba la acequia de Favara, la más representativa de la huerta sur de la ciudad pues envolvía a ésta por su parte occidental y meridional para extenderse en un largo y grueso rectángulo hacia el sur a lo largo de la carretera real de Madrid por los pueblos que existen a lo largo de ella. Así pues, esta huerta se extendía desde casi el río Turia (a la altura del Jardín Botánico en la calle Quart) hasta la población de Albal, con más de ocho kilómetros de largo, y desde Patraix hasta la Fuente de San Luis. Como el resto de huertas y acequias principales de la Huerta de Valencia sus orígenes son medievales islámicos, y está documentado su funcionamiento en el momento de la conquista de Valencia por Jaime I. Durante los siglos posteriores ha seguido funcionando sin mayores cambios hasta la gran transformación de la segunda mitad del siglo XX. 

Molí de la Gàbia

El molino en estado ruinoso

Compuertas de la acequia, junto al molí

El molino se encuentra en el denominado Braç de la Gàbia, que partía del actual cauce nuevo del río Turia y llega hasta el Forn d’Alcedo; braç del que queda un fragmento que corre alineado a la fachada norte del molino. En las inmediaciones existe un partidor de aguas y el paso del camino con unas grandes losas de piedra caliza sobre el Braç de la la Gàbia y los restos de una cebera. El edificio actual es posiblemente fruto de una reforma del s XVII. Su estado de es bastante malo, en particular los cuerpos meridionales, anexos al cuerpo principal del molino, que ha sido ocupado ilegalmente en múltiples ocasiones e incluso ha sufrido incendios que han afectado al techo y vigas de madera. En 2013 el Ayuntamiento de Valencia se vio obligado a actuar de oficio por su estado de deterioro y ha requerido a la propiedad que intervenga para que no se produzca la caída del conjunto arquitectónico, la realidad es que la contrata municipal ha tenido que actuar subsidiariamente. 

Alquería de Nicolau

Parte trasera de la alquería

La Alquería de Nicolau la forman dos edificios habitados, denominados 5 y 7 del antiguo Camí de Picassent, con dos crujías paralelas a fachada y origen moderno, con patio posterior y cobertizos, posiblemente de finales del s XIX o inicios del s XX, situadas en el recodo del camino. Las alquerías de Nicolau se quedan a la parte posterior de un vial rodado que separa las alquerías del molino. Junto al molino había hasta no hace mucho tiempo una agrupación de casas, un colegio, una carnicería y un estanco. Incluso había casas de colonos construidas en 1901. El conjunto está reconocido como Bien de Relevancia Local

Fuentes:
Fotografías originales del autor

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